AMERICAN BEAUTY

Creo que hay pocos placeres como ir al teatro cuando hace un tiepo terrible. Elegir la obra es fundamental porque como todos sabemos el teatro es caro y si la cagas al final acabas acordandote de cada penique que has invertido. Yo no lo pienso mucho. De verdad importan dos cosas: una buena obra y unos buenos actores. Obras buenas las ponen en todas partes, buenos actores también, pero los mejores están el Londres.

El Old Vic es un teatro cerca de Waterloo. Es conocido porque ha acogido a los mejores actores y obras incluyendo a Laurence Olivier o Richard Burton. Desde hace un par de años han puesto a un nuevo director artistico (dicese, el tipo que contrata las obras). No a todos les ha gustado porque ocasionalemente la elecciones no han sido muy buenas y... bueno, en cada temporada él es el protagonista de una de ellas al menos. El tipo es conocido como KEVIN SPACEY. Supongo que a alguien le suena.

A Moon For the Misbegotten es una obra de Eugene O'Neill, cursó estudios en internados católicos y en la Universidad de Princeton durante un año. Trabajó en una casa de negocios por correspondencia, buscó oro en Honduras, colaboró en la dirección de la compañía teatral de su padre y actuó en ella, fue oficinista en Buenos Aires, transportó mulas en una lancha ganadera, navegó como marinero y fue periodista en Connecticut. En 1912 contrajo una tuberculosis incipiente y tuvo tiempo de «pensar». Empezó a escribir. Curiosamente el personaje de Spacey hizo también muchos trabajos de estos pero parece que Jim esta basado en su propio hermano. Más allá del horizonte, la primera comedia larga de O'Neill, que obtuvo el premio Pulitzer de 1920. En 1922 volvieron a concedérselo por Anna Christie. Con la obra Extraño interludio consiguió una tercera vez en 1928 (casi nada). El año 1936 O'Neill recibió el premio Nobel de Literatura. El comenta de hielo, 1946, ya fue estrenadaen el Old Vic con Kevin sobre el escenario también. Falleció en 1956, después de una larga convalecencia de la Enfermedad de Parkinson.

A Moon for the Misbegotten o Una Luna para el bastardo sobre un día en una granja de Connecticut en los años 30. Josie vive con su padre alcoholico (Colm Meaney) mientras ha visto como todos sus hermanos se han ido. Obviamente siguiendo la linea de sadismo básico de todas las mujeres se va a enamorar de su administrador que para hacerlo más emocionante es aún más alcoholico, mujeriego y retorcido que el padre (lo que supongo que le da enconto...)

A parte de un par de datos que se te escapan por la “agudeza verbal y la diarrea verborreica” de algún personaje fue bastante emocionante poder disfrutar de una interesante e irrepetible noche teatral.

ANA