KIT KAT

Estos días hemos tenido frio en Londres y... bueno, un frio del carajo.

No hay novedades en el frente, algunas se han tomado un respiro (En realidad no ha sido un respiro, me he ido el fin de semana a Madrid a realizar un curso intensivo de castellano porque con los haiga, probes, la no utilización de artículos y preposiciones y que esta gente no sabe los diferentes tiempos verbales que existen, estaba empezando a hablar en plan pueblerina de Girona y las únicas que me entendían eran las cabras y las ardillas). Ben ha salido de la carcel pero no se ha vuelto a aacercar por Archway (a lo mejor se esconde detras de los árboles y no le vemos). El fin de semana ha pasado en un suspiro, el sábado estuve en el restaurante italiano y me comí una hamburguesa del tamaño de Albacete por la cara ( ya que los sueldos no dan para mucho al menos me cobro en especias ). No fue mal, cogí las notasbien, serví aceptablemnte para ser novata y... ¡¡Sólo rompí una taza!! En fin, de todas formas para el fin de semana es poco curro y necesito un Part Time más completo o venderé la ropa de Sonia de estraperlo en el el mercado negro.

El domingo gracias al cielo Juanjo Y Rocio me sacaron de nuevo del absoluto tedio y aburrimiento (sólo roto por la visión de Bridget Jones en la comuna) y fuimos a ver el City Hall. Hay mucho motivos para acercarse el primer domingo de mes y visitarlo (sólo abren ese día):

1. Las vistas sobre Tower Bridge, Tower of London y el Belfast.

2. En la cafetería tienen Coca Cola de Vainilla.

3. También venden patatas fritas de rábano.

4. Tienen un mapita de Londres en plan alfombra y los ingleses se arrastran por el suelo para buscarse.

5. Y el más importante hay cientos de panfletos y papelitos para llenar el bolso y regalan chapas y llaveritos si llegas pronto. (No os penseis que somos gorrones... ¡¡Noo!!)

Después de comer unos bocatas (gentileza una vez más de Juanjo Y Rocio) pasamos el resto de la tarde paseando por el río ( Thames arriba, Thames abajo) con parada y sosta en un café Manga muy recogidito sin ningún inglés a la vista justito en frente de London Eye y el Aquarium.

La gran novedad era empezar el curso de inglés, ese tan fantástico y tan gratis en que nos hemos matriculado. En teoría empezábamos hoy pero.. ¡Tachan! El profesor esta en no-se-donde y no ha venido así que regresamos la próxima semana con el mismo horario a ver si hay suerte. La pinta es buena, no estamos rodeados de negros y la gente habla bastante bien aunque hay que tener en cuanta que llevan aquí de dos a cuatro años. Es el nivel superior y dicen que aprendes mucho. La verdad es que está mejor de lo que pensaba porque ya me veía en un gueto con africanos en tanga hablando en plan Ugaa,Ugaa.

Las visitas de esta semana han sido interesantes por un lado la madre de Mercé con su hermana pequeña que ha reajustado la vida de a comuna y ha trasladado a la italiana con las gritonas y de otro la esperada llegada del novio de Gritona 1 que llega hoy con víveres (aunque estas en lugar de pedir jabugo piden tomate Solís las muy pavas).

Yo he mantenido la primera pelea verbal con Maria a ver si arregla el pitido tedioso de a alarma de incendios. Ella sostiene que ya me acostumbraré y yo la he dicho que me voy a convertir en Jack Nicholson en El Resplandor. Tengo que pasarme a apuntar que compren la pila porque la mierda de burocracia de la vieja no me permite comprar la puta batería y solucionarlo antes de que me vuelva loca de remate.

ANA