No estoy hablando del 11-S ni de nuestro pebetero el Windsor, estoy hablando de mí, que os pensabais que no iba a trabajar nunca, pues sí, lo estoy haciendo. De domingo a viernes, de 7.30 a 10.30 de la mañana, en los desayunos de un hotel, me pagan una mierda (antes de cobrarla ya me he gastado mi primera paga) pero tengo todo el día para seguir con mis clases y petardeando.
No hay ni un solo inglés en ese restaurante, así que acabaré hablando con acento coreano, pero algo es algo. Aunque tampoco hay que darle mucha importancia o ¿no os acordáis de aquel restaurante donde estuve tres días en el que no me pagaban y no me dejaban hablar con mis compañeros?
Nada más empezar he tenido que pedir tres días libres. Vamos a ver si me los conceden, por favor, por favor, por favor. ¿Para qué? Uy, eso es querer saber demasiado. Tiempo al tiempo.
Sonia
No hay comentarios:
Publicar un comentario